La ciudad más romántica se viste de rosa en cada rincón y sorprende con sus múltiples facetas para celebrar el amor.
Todo en la capital francesa tiene ese toque romántico que la hace una ciudad perfecta para recorrer durante el frío invierno, pero más aún al calor de esta fecha tan especial para los enamorados. Durante el 14 de febrero y los días previos, toda la ciudad se prepara especialmente para recibir esta fecha, de hecho se la considera temporada alta de turismo ya que muchas parejas eligen este destino para festejar aniversarios o mejor aún, proponerse matrimonio.
El sonido de un tranquilo acordeón en las calles, las caminatas por el Río Sena, los barrios bohemios que se iluminan al atardecer y las flores que decoran cada rincón, todo se vuelve más especial para festejar San Valentín. En esta nota recopilamos una serie de ideas y opciones para hacer que este viaje se tiña de romanticismo parisino en cada detalle.
Tomarse la foto perfecta
El mejor recuerdo para compartir en redes sociales retratándose en pareja, es una foto en la locación más solicitada por los enamorados. “Le mur des je t’aime”, es la pared de los te amo escritos en más de 300 idiomas diferentes. Esta obra de arte gigante esta completamente hecha de azulejos azules y con las inscripciones en blanco, ocupando todo el costado de un edificio. Fue idea del francés Frédéric Baron quién pensó en este lugar especial para conmemorar el amor y que por supuesto reúne todos los días miles de parejas recién casadas fotografiándose. Queda en el Square Jehan Rictus, un parque al lado de la Plaza des Abbesses, en el barrio de Montmatre.
Hacer Compras
Algo para disfrutar allí mismo o para llevar a casa siempre es necesario. En estas fechas nunca están de más y cotizan fuerte los chocolates finos, las esencias, flores y lencería en cada negocio. Delicias de lujo se pueden encontrar en una caja de trufas de Maison du Chocolat o bombones de caramelo en Popelini por ejemplo. Las fragancias más exquisitas en L’Artisan Parfumeur y para completar el combo un buen atuendo sexy en boutiques como: Chantelle, Empreinte, Charmel, Passionata o Simone Pérèle, sin duda la mejor lencería de la ciudad. Ideal para ir de a dos y elegir algo para la noche.
Participar del Love Run
Son actividades y desafíos para parejas, como en una carrera, donde sortean obstáculos muy excéntricos, siempre tomados de la mano. Este evento exclusivo del V-Day se hace todos los años en el Bois de Boulogne , un gran parque situado fuera de la circunvalación de París. Es para pasarse todo el día juntos a pura diversión y al final termina con un» Festival de Amor «, con premios, cabina de fotos , DJ , y tragos.
Visitar un lugar muy sexy
Los cabarets son un atracción muy clásica parisina y para esta fecha tienen shows especiales. Moulin Rouge, en Montmartre o Caballo loco (Crazy Horse) justo al lado de los Campos Elíseos, son la salida perfecta. Estos sitios que comenzaron allá por los años ’50 con bailes de mujeres en medias de red muy sensuales, hoy tienen performances muy contemporáneas y de una calidad insuperable. Para el Día de San Valentín (y los dos días previos), la oferta incluye el espectáculo, Champagne, fotos y asientos reservados .
Alojarse en un Love Hotel
Algunos de los hoteles alojamiento más famosos de París ofrecen un día completo de placer solo reservado para parejas. La noche “XXX” tiene de todo, incluidos algunos souvenirs eróticos para la habitación. Mama Shelter, Maison Souquet o Love Hotel Paris, son de los más requeridos. Este último es el primer hotel de estas características en la capital parisina y se ubica en pleno centro de la ciudad.
Pasear en barco
La postal perfecta de la ciudad en un ambiente muy romántico, se da cada noche a bordo de un crucero que navega por el Sena. Con cena incluida, la velada invita a descubrir los más bellos monumentos, puentes y sitios históricos mientras se pasa una velada de ensueño con música en vivo.
Hacer un paseo autóctono
Al atardecer, nada más hermoso que recorrer París de la mano como dos jóvenes recién enamorados. Es el momento perfecto para disfrutarse sin prisas. Para hacerlo más inolvidable, un tour imperdible es «Paris by night» , que dura 2 hrs. y recorre todos los mejores sitios a bordo del famoso Citröen francés 2CV. El toque vintage perfecto para recordarlo siempre.
Cenar en la Torre Eiffel
Este es un clásico que nunca falla. A 58 metros de altura se ubica el restaurante «58 Tour Eiffel», de alta cocina y la mejor vista que se pueda tener. En el día de San Valentín, este monumento se viste de gala y ofrece cena para dos con muchas sorpresas. Incluye en acceso prioritario al 1er piso del lugar para obtener una panorámica perfecta. El ambiente es lo más romántico que uno pueda desear e invita a extender la cena todo lo posible.
Amor, disfrute, romanticismo y una cuota de diversión es lo que nos propone San Valentín, una fecha adorada por muchos y odiada por otros tantos. Pero en definitiva es la que nos moviliza a hacer algo diferente en pareja y mucho más si justo estamos en París, la ciudad del amor.
sin ninguna duda una maravillosa ciudad un abrazo meme
Saludos!!!